La ‘startup’ Qubiz.team utiliza la tecnología cuántica para desarrollar sensores y herramientas de medición de una precisión sin precedentes
Qubiz.team
Desarrollo de herramientas de medición basadas en la sensórica y metrología cuánticas
B-Venture
¿Qué es? Punto de encuentro entre 'startups', inversores, empresas y figuras relevantes del ecosistema emprendedor.
¿Dónde y cuándo? Palacio Euskalduna, 20 y 21 de octubre.
Impulsa. EL CORREO
Patrocinan. Departamento de Industria, Transición Energética y Sostenibilidad del Gobierno vasco, la agencia de desarrollo SPRI, la Diputación foral de Bizkaia y el Ayuntamiento de Bilbao.
Colaboran. BStartup de Banco Sabadell, Fundación BBK, Laboral Kutxa, CaixaBank, Banco Santander y la Universidad de Deusto.
Este sensor, con el que ya están realizando pruebas de concepto a petición de potenciales clientes, estará en el mercado el año que viene, por lo que ellos han pasado a investigar otras aplicaciones de la sensórica y metrología cuántica. Y terreno para moverse no les va a faltar porque esta tecnología permite medir con una precisión, sensibilidad y resolución sin precedentes fenómenos físicos como el tiempo, la gravedad, la temperatura, la presión, la rotación, la aceleración, la frecuencia y los campos magnéticos o eléctricos. A esto se suma otra cualidad; los sensores pueden trabajar en condiciones extremas. «Los hemos probado en hornos con temperaturas que rondaban los mil grados, lo que les hace aptos para procesos industriales en lo que ahora tienen sensores que sencillamente no sobreviven», explica De la Herrán y Crespo. Para lograr que, como en este caso, sean resistentes a temperaturas tan altas recurren al uso de diamantes sintéticos, cuya fotoluminiscencia –que es lo que se mide e interpreta– varía en función de las condiciones a que se someten.
«Frente a la computación y las telecomunicaciones, ésta es el área de la tecnología cuántica menos conocida pese a que, en realidad, lleva décadas con nosotros. De hecho, al contrario de lo que ocurre con las otras dos, con ella se puede hacer ya producto porque ya hay mucho desarrollo previo. Es, por ejemplo, la ciencia que hay detrás de una resonancia magnética nuclear o del láser que pone multas en la autopista. Eso son tecnologías cuánticas de primera generación y nosotros estamos intentando ser punta de lanza de la segunda», explica el cofundador de la empresa, que este año ha logrado el sello de excelencia del programa EIC Accelerator, iniciativa con la que la Unión Europea apoya la consolidación de ‘startups’ y pymes consideradas altamente innovadoras y capaces de llevar al mercado tecnologías y productos disruptivos, y ya forma parte del Consorcio Europeo de la Industria Cuántica (QuIC).